La función más importante de los riñones es filtrar la sangre y líquidos. Actúan como una central de filtrado. Una proporción muy grande de toxinas se eliminan a través de los riñones, ya que éstos ayudan a eliminar toxinas del hígado. Una gran cantidad de estos residuos producirán unos riñones con estrés.
Aproximadamente 5 litros de sangre por hora pasan por nuestros riñones, para ser descompuesta en componentes nutricionales. Demasiada sal en la alimentación contribuirá a presión alta, ya que los riñones ayudan a equilibrar la presión sanguínea.
Los riñones están conectados a las suprarrenales, situadas en la parte superior de cada riñón, y a la adrenalina, hormona que se genera en situaciones de emergencia.
La energía vital del riñón se debilita y decrece a medida que envejecemos, ocasionando síntomas como pérdida del oído, huesos débiles y falta de memoria.
Los riñones regulan el equilibrio del Ph entre ácido y alcalino y también el nivel de minerales que contiene la sangre. Todos los problemas de los riñones parece que están relacionados con el equilibrio entre ácido/alcalino.
Los riñones reflejan la calidad de nuestro cabello y huesos. Y, por descontado, este desequilibrio tan habitual hoy en día: la osteoporosis, se podría muy bien paliar cuidando más de nuestros riñones.
Es esencial preservar y cuidar nuestros riñones, los órganos más profundos en el cuerpo y que almacenan la energía vital Yin. Todo el cuerpo y todos sus órganos necesitan esta energía vital de los riñones para seguir adelante.
También los riñones y las suprarrenales contribuyen a regular la temperatura del cuerpo, el nivel de energía, el apetito sexual y la vitalidad en general.
Los riñones están encargados de los huesos y de la médula ósea. Falta de energía en los riñones se representará también en piernas y rodillas débiles, rigidez en la columna vertebral, etc.
Síntomas de desequilibrio
Vejez prematura y síntomas de senilidad, esterilidad e impotencia, falta de apetito sexual, crecimiento retardado, ojeras en los ojos, cabello partido y sin brillo, retención de líquidos e hinchazón, congestión linfática, dolor en la parte inferior de la espalda, cabello con canas, pérdida de cabello, huesos débiles y quebradizos, problemas de orina, tendencia a tener siempre frío, apatía, problemas de rodillas, memoria pobre.
Tiempo del día
Entre las 5-7 de la tarde corresponde al momento de los riñones, que puede que corresponda al momento del día con menos energía. Si hay debilidad en los riñones, es importantísimo descansar en estas horas.
Síntomas emocionales
Como el agua, nuestras emociones tendrían que fluir. La emoción 'miedo' puede bloquear el fluir de nuestras emociones y nuestra energía vital.
Miedo, falta de claridad y decisión, falta de voluntad y coraje, timidez, sensación de agobio en la vida, miedo a fallar, a equivocarse, depresión, echar la culpa a los demás, o esperar que ellos tomen la decisión final.
A los riñones, se les denomina el asiento del miedo, que se puede ver manifestado cuando la adrenalina actúa en situaciones de "luchar o huir".
Los problemas de los riñones también ocurren cuando nos empeñamos en mantener hábitos emocionales del pasado y negativos para nosotros. Podemos relacionar claramente las piedras en el riñón, con lágrimas y tristeza que no se han depurado, sacado fuera.
Lo que debilita al riñón
Alimentos:
- Alimentos y bebidas frías.
- El uso de congelados (aunque después se coman calientes).
- El uso de estimulantes (café, té).
- Alcohol y vinagres (otra forma de alcohol, que nos desmineraliza).
- Toda clase de azúcares refinados, bollería, bebidas gaseosas azucaradas, chocolate, miel. Producen al consumirlos un Ph ácido en la sangre, con la correspondiente desmineralización.
- Exceso de frutas o el consumo de frutas tropicales (ya que por su naturaleza fría, debilitan el riñón).
- El consumo de verduras solanáceas (tomates, patatas, berenjenas y pimientos) también nos desmineralizan. Su contenido entre sodio y potasio, está muy desequilibrado en correspondencia al equilibrio de nuestro cuerpo.
- Exceso de comidas crudas.
- El uso de hornos microondas y cocinas eléctricas.
Lo que refuerza al riñón
Alimentos:
La energía de los riñones hay que regenerarla pero muy poco a poco, ya que si lo hacemos muy deprisa o de forma drástica, todavía creará más problemas.
Una alimentación natural, con ingredientes biológicos nos aportará vida y energía.
La alimentación tradicional, que consumieron nuestros antepasados durante miles de años estaba basada en: cereales integrales, legumbres, verduras, frutas locales y estacionales, semillas, frutos secos, con una pequeña cantidad de productos animales, algas y condimentos naturales.
- Utilizar las verduras del mar -algas- por su gran aporte en minerales, nos revitaliza y alcaliniza la sangre.
- Incrementar el pescado.
- El consumo diario de cereales integrales como el trigo sarraceno, mijo, arroz de grano corto, quinoa.
- El consumo regular de legumbres como azukis y lentejas, cocinadas con una generosa cantidad de algas.
- El uso de verduras de raíz y redondas (zanahorias, cebollas, chirivías, calabaza, nabos…)
- Verduras verdes cocinadas con algas.
- Especies que calienten (canela, jengibre, cardamomo, nuez moscada, clavo…)
Estilos de cocción:
Que calienten y remineralicen (estofados, horno, salteados, vapor, presión…).
Bebidas:
- Infusiones de regaliz, tomillo, romero, jengibre…
- Mantener nuestro Ph ligeramente alcalino, usando a diario condimentos como el miso, salsa de soja o tamari, umeboshi.
Forma de vida:
- Descansar todo lo que podamos.
- Ir a dormir temprano.
- Dormir más en invierno.
- Si usamos baños, añadir un poco de sal marina en el agua. Evitar los jacuzzis, piscinas y saunas.
Observar y ser conscientes de las cualidades y efectos de cada alimento, será la base para obtener nuestro propio estándar de salud y vitalidad. Así aportaremos a nuestra vida la base para la armonía y el equilibrio en nuestro cuerpo, mente, emociones y espíritu.